Ya lo sabía la familia más allegada, es decir, los de casa, porque aún faltaba mucha gente a la que alegrar el día..... Habíamos llegado a un pacto con nuestras familias para que nos guardaran el secreto hasta las 12 semanas, momento en el que volvíamos a ir al ginecólogo para comprobar que todo estaba bien, la verdad que nos dió mucha pena privarles de dar la noticia inmediatamente, porque todos querían gritarlo a los cuatro vientos, y nosotros no les dejamos... recuerdo que mi padre lo primero que dijo fué: "vaya, pues el lunes me tocará invitar a almorzar a todos los compañeros, ya que voy a ser abuelo" jejeje cómo le cambió la cara cuando le dije:"NO, no puedes" pobret... pero todos hicieron el esfuerzo y respetaron el pacto.
Viernes 28 de Enero de 2011
Me tocaba volver a Palma, junto a César, por una parte estaba contenta por volver junto a él, pero por otro lado....siempre es difícil, al fin y al cabo nuestra casa está en Valencia. Toda la familia de mi padre estaba pendiente de mi "tita" Ana, que estaba a punto de dar a luz, mi tío Valen por fin iba a ser padre y yo me lo iba a perder... En cuanto llegué al aeropuerto de Palma encendí el móvil y me llegó un mensaje de mi padre donde me enviaba la foto de Gonzalo, el benjamín, al menos de momento, de la familia Ruiz, no pude contener las lágrimas al verlo, era un niño precioso, estaba segura que mi tío Valen alucinaría cuando se enterase que yo también iba a ser mamá. A los pocos minutos conseguí hablar con él por teléfono: "Enhorabuena, ya eres papá (y ni te imaginas que yo pronto seré mamá)" que momento tan maravilloso, aunque me dió un poco de pena no estar con ellos en ese momento....
Miércoles 16 de Febrero de 2011
Ha llegado la hora...¡Ya estamos de 12 semanas!, estábamos como locos por volver a ver al garbancito, y si todo iba bien, podríamos decírselo a todo el mundo, sin excepción. La eco de las 12 semanas también nos la hicimos en Palma para que César y yo pudiéramos compartir ese momento, es lo mínimo que podía hacer por él. La imagen que vimos fue muy distinta a la primera eco: ¡Ya tiene formita de bebé!, verdaderamente es un milagro, es imposible imaginar que un ser que tiene el tamaño de una aceituna pueda parecer un bebé, pero para que no lo tengáis que imaginar aquí os dejo la 2ª foto de Irene:
Es tan emocionante ver como evolucionan: de un puntito de milimetros, a un renacuajo nadando y luego a un bebé precioso.
ResponderEliminarMe gusta tu blog.
Un beso,
Nuria
P.D. Veo que n osoy la única despierta a estas horas, jajaja.